Pacharán en la cocina


Me he apuntado  a una cata de pacharán navarro. Quién lo hubiera pensado hace unos años, cuando sólo se oía hablar de catas de vinos. Hoy nos encontramos con catas de aceite, de quesos… y ninguna de ellas nos suena raro, hemos aprendido que nuestro paladar se puede educar para apreciar las diferentes características de cualquier producto.
Al final de la cata nos hablan también de recetas de cocina elaboradas con pacharán navarro. Escalopines con  salsa de pacharán, foie a la plancha con reducción de pacharán, ternera o pollo guisados en salsa de pacharán… Los compañeros dicen que se empiezan a ver en los restaurantes este tipo de platos, yo hace tiempo que probé el sorbete de pacharán.
Pero lo que más me sorprende es lo que nos cuenta una mujer que también participa en la cata. Nos cuenta que cuando su hijo era pequeño no quería comer carne, al parecer no le gustaba su sabor. Un día se le ocurrió, mientras le hacía un filete a la plancha, añadir un chorrito de pacharán. Manteniendo la sartén al fuego dejó evaporar todo el alcohol (por lo visto esto viene a ser una reducción de pacharán). Ese día su hijo comió el filete sin queja y desde entonces, gracias al pacharán, dar de comer carne a su hijo dejó de ser una continua discusión.